Perdonar y pedir perdón, es dejar que actúe el Espíritu, pedir perdón es una de las cosas más difíciles de hacer y a la vez uno de los actos más nobles que alguien puede hacer. Primero, porque a veces cuesta reconocer los errores cometidos. Uno se mete en su propio mundo, ve las cosas desde su perspectiva y muchas veces no se miden las consecuencias que puedan acarrear. Y segundo, porque duele saber que con determinada acción se ha herido a otros.
Hoy hemos sido testigo de un acto noble, la reunión de las víctimas de los abusos de P. Karadima con nuestro Pastor Monseñor Ricardo Ezzati: “Fue una reunión muy cordial, muy sincera, muy honesta y Monseñor Ezzati nos pidió perdón a nombre de la Iglesia de Santiago por todo lo que hemos vivido y lo que hemos sufrido cada uno de nosotros y lo acogemos con cariño” “tuvo una actitud sumamente respetuosa, humilde, como la que uno espera de su pastor”. Palabras de Juan Carlos Cruz y James Hamilton, luego de la entrevista.
Denunciar los actos de abuso cometidos por miembros de la Iglesia no es un ataque a la Iglesia, es buscar y vivir en la verdad, es una invitación y la oportunidad de trabajar juntos para que todo lo que ha sido causa de dolor y se interpone en el camino de la VERDAD sea allanado para vivir en y a la luz especialmente si este caminar se hace a partir del acto noble de pedir perdón porque El que ama a Dios, ame también a su hermano.
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