Una imagen
Vale más que mil…
Esta fotografía me ha impactado desde la primera vez que la vi porque esta imagen vale más que mil palabras. Por mucho tiempo quise saber cuál era la historia detrás de ella. Ahora la comparto con tod@s l@s Amig@s de La Katisma.
El 4 junio de 1962, el capellán Padre Luis Padilla está socorriendo como buen pastor a un soldado herido de muerte por un francotirador. Si analizamos la imagen podemos ver como el soldado herido trata de incorporarse aferrándose a la sotana del sacerdote. Es un acto supremo de entrega por parte del sacerdote y de infinita confianza y esperanza del soldado.
Que elocuente es esta imagen, me recuerda a los sacerdotes, los buenos pastores, que siempre han estado presentes en mi vida, el que me dio el Bautismo, mi primera comunión o aquel Obispo que viendo que los cordones de mis zapatos estaban desatados se inclinó y con cariño y paciencia me enseño a atarlos, mis maestros del seminario y mis hermanos de comunidad, a todos ellos recuerdo con gran cariño y gratitud.
En palabras de S.S. Benedicto XVI “todo sacerdote debe ser boca y corazón de Cristo, es decir que debe enseñar a través de su vida, sus palabras y obras, la Verdad del Señor que han transformado su vida y que puede transformar la vida de quien lo acoge” haciendo realidad en la propia vida la sed y el celo de Jesús, el Sumo y Eterno Sacerdote, dulce y Buen Pastor.
"Un buen pastor, un pastor según el Corazón de Dios, es el tesoro más grande que el buen Dios puede conceder a una parroquia, y uno de los dones más preciosos de la misericordia divina".
San Juan María Vianney
(El autor de la fotografía es Héctor Rondón Lovera, quien confiesa que tuvo que tirarse al suelo para evitar recibir un disparo, no estaba seguro de cómo se las arregló para tomarla.)
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