15 de Agosto Día de la Vida Consagrada, celebrado bajo el manto de María, la primera Consagrada.
“El Espíritu de Dios me ha consagrado” (Lc.4, 18).
La vida consagrada tiene su origen y fundamento en Jesús: es querida por Él para la edificación y la santidad de su Iglesia, y testimonio visible en el mundo.
la firme voluntad de vivir el Mensaje de Cristo y de configurar la propia vida según Él, ha sido y continúa siendo el fin de aquell@s que entregan su vida y ser entero al Evangelio, ya sea en la misión activa o en la vida oculta de la contemplación.
Es el Evangelio vivido cotidianamente el elemento que da fascinación y belleza a la vida consagrada y la presenta ante el mundo como una alternativa viable. Esto necesita nuestra sociedad actual, esto esperan los cristianos: que continúen y reaviven el Evangelio hecho vida. Acompañemos hoy y siempre con nuestra oración a las almas consagradas y demos gracias porque la Iglesia nunca se verá privada de ella.
“Cultiven la vida de unión con Dios, el espíritu de oración, porque en la vida religiosa y especialmente en nuestro Instituto, es necesario buscar cerca del Señor, el valor y el celo necesarios para lograr la conquista de las almas” (Sta. María Eufrasia Pelletier; Instruc. 13)
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