SEMANA SANTA, 
DÍAS SANTOS Y
NUESTROS DÍAS SANTOS
En ésta época se escucha bastante acerca de la crucifixión de Jesús.
Los medios de comunicación, algunos de ellos, propagan por doquier las ideas acerca de su sacrificio en la cruz del calvario. La televisión en especial el así llamado canal católico, pero que poco tiene de “católico” se prepara para presentar las mejores películas o programas especiales que se refieren a su Pasión, Muerte y Resurrección.

1. Época de limpieza Espiritual (San Lucas 19: 45-46)

2. Época de darle lo mejor al Señor (San Mateo 26: 6-7)

3. Época de someternos a su voluntad (San Mateo 26: 39)

4. Época de revisar nuestra fidelidad a Dios (San Mateo 26: 14-16; 26: 34)

5. Época de Servir (San Lucas 22: 24-26)

6. Época de vigilancia Espiritual.(San Lucas 22:30)


¿Será que todas estas cosas deberán de limitarse a una semana específica del año?
¿Acaso no será que todos nuestros días deberían de ser Santos?

La verdadera realidad es que cada día del año es Santo para Dios y también lo debería ser para el pueblo de Dios. Cristo debe de ser modelo de todo hombre para así hacer que este mundo llegue a la Santidad. Que los hombres sean igual que Jesús y busquen siempre cumplir con la voluntad de Dios, como lo hizo Jesús sin importarle el sufrimiento, las injusticias, las humillaciones…

“Tener entre vosotros los mismos sentimientos que tuvo Cristo, el cual, siendo de condición Divina, no retuvo ávidamente el ser igual a Dios, sino que se despojo de si mismo tomando condición de silencio, haciéndose semejante a los hombres y apareciendo en su porte como hombre; y se humilló a si mismo, obedeciendo hasta la muerte de Cruz” San Pablo (Flp 2,5-8)

Demos hoy el primer paso para que nuestros días sean Santos.
Les invito a vivir esta Jornada Santa visitando este link: http://www.iglesia.cl/especiales/semanasanta2010/recursos/textos.html  o

Allí encontrarán una guía para un Retiro según la Espiritualidad de San Juan Eudes San Juan Eudes Padre espiritual de la Congregación del Buen Pastor. Y no olvidemos orar por nuestra Iglesia por el camino de cruz que camina en estos días producto de los hechos que conocemos, lamentamos y sufrimos. Sin olvidar a las victimas y su propio sufrimiento.


“Jesús nos ha sido dado para nuestra redención” San Juan Eudes.

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